Es mi segundo día con frío en Cracovia. El tiempo aquí es muy impredecible. Pasa de 22º a 15º en cinco minutos, es una pasada. Cuando terminas de quitarte el abrigo del calor que hace, ya te está entrando un frío de muerte. Verano es la época más lluviosa aquí. Estoy deseando que llegue el Otoño para estar a gusto.
Eran las 10 AM. La cabeza me dolía horrores. Recordé todas esas veces que bajaba a almorzar en mi casa después de salir de marcha. Mi madre me tenía preparado siempre una pastilla de ibuprofeno. Casi se vuelve una tradición los domingos. Con nostalgia, busqué en mi neceser unas pastillas de ése fármaco que mi madre me preparó para estos casos. Doy gracias por su infinita sabiduría.
Me quedé en la cama un par de horas más hasta que me recuperé. No parecía que ese día fuera a pasar nada interesante, así que no me di prisas. Después de una ducha bien rica, me dirigí al apartamento de los chicos.
Las costumbres polacas son aún extrañas para mí. Yo me helaba del frío, pero yo sólo veía mujeres en falda y enseñando las piernas. Los polacos no toleran más el frío que nosotros, ni por asomo. Es más, creo que nosotros tenemos más resistencia. Lo que pasa es que en ésta época del año aún pueden permitirse vestirse decentemente guapos, antes de la gran nevada. Recordé las palabras de uno de mis compañeros: "¿Ves cómo camina esa tía?. Va a esa velocidad por el frío, cortando el viento. Velocidad polaca hermano". No le faltaba razón. Después de ver caminar a los madrileños, no pensé que encontraría a gente con tanta prisa como ellos.
Hoy tocó hacer más compras en el super. Productos de limpieza. Iban a usar por primera vez la lavadora, y estaban algo entusiasmados. Yo cómo soy muy distraído, no le presté mucha atención a la compra en sí, y fui a la zona de chucherías. El Carrefour polaco no tendrá sección de ropa, ni venderá toallas, pero en comidas raras nadie le gana: papas sabor kebab, chocolate picante, chocolate con wasabi... el picante es muy normal en tierras polacas. 2 de cada 3 comidas que compramos sin saber qué son, pican. Una jodida locura. No me extrañaría que mojaran las papas fritas en el refresco.
Yo me quedé con el chocolate Milka relleno de yogur de fresa. Joder, con perdón. Un chocolate que no es de éste mundo.
La cerveza Tyskie es una marca muy famosa en Polonia. También está exquista. Una lata de 0.5 L cuesta 60 céntimos. Increíblemente barato. En Las Palmas, algo de ese precio siempre suele ser una basura. Pero como es barato, no te quejas. Después de par de vueltas más, ya estábamos listos para volver a casa y almorzar... a las 5 de la tarde. Maldita sea la pachorra de esta gente. Aunque uno ya se va acostumbrando.
Esta vez tocaron espaguetis. Deliciosos, si señor. La salsa de tomate con trocitos que compramos fue todo un acierto. Y con su atún. Para chuparse los dedos. El día estaba yendo increíblemente tranquilo y normal. Justo como yo lo había querido.
Más costumbres polacas: cuando conoces a una mujer, le das la mano, no dos besos ni uno. Me parece sublime ésto. ¿No es muy incómodo conocer a una mujer y tener que estar dándote dos besos?. Siempre me ha parecido extraño. Dar la mano mola. Quedas bien y es más natural. Los besos son un invento de los españoles calientes y de cachetes fríos.
"Loco, el jamón este no va a durar mucho más...", dijo uno de mis compañeros. Resulta que habían comprado medio kilo de jamón en la última compra, y estaba intacto. No iba a durar mucho más, así que nos hicimos muchos sándwiches de jamón y queso para la cena. Nos hartamos a más no poder. Es una de esas cosas normales que le alegran a un el día, el vaciar la despensa.
La noche acabó con todos jugando al Monopoly en el iPad de uno de ellos. Muy cómodo. La de tiempo que te ahorras en colocar billetes y fichas... el inventazo del futuro, si señor. El día salió a pedir de boca. Sólo lo empañó el hecho de recordar que al día siguiente tenía que levantarme temprano.
Más costumbres polacas: cuando conoces a una mujer, le das la mano, no dos besos ni uno. Me parece sublime ésto. ¿No es muy incómodo conocer a una mujer y tener que estar dándote dos besos?. Siempre me ha parecido extraño. Dar la mano mola. Quedas bien y es más natural. Los besos son un invento de los españoles calientes y de cachetes fríos.
"Loco, el jamón este no va a durar mucho más...", dijo uno de mis compañeros. Resulta que habían comprado medio kilo de jamón en la última compra, y estaba intacto. No iba a durar mucho más, así que nos hicimos muchos sándwiches de jamón y queso para la cena. Nos hartamos a más no poder. Es una de esas cosas normales que le alegran a un el día, el vaciar la despensa.
La noche acabó con todos jugando al Monopoly en el iPad de uno de ellos. Muy cómodo. La de tiempo que te ahorras en colocar billetes y fichas... el inventazo del futuro, si señor. El día salió a pedir de boca. Sólo lo empañó el hecho de recordar que al día siguiente tenía que levantarme temprano.
Deberías haber puesto, el día terminó genial gracias que pude hablar con mi amigo Marlon unos minutos después de lo que pareció una eternidad :D
ResponderEliminar(Por si acaso esto no lo lee nadie también lo pondré en Facebook :D)
Pues sí, debería haberlo puesto xD
EliminarLos besos son un invento de los españoles calientes y de cachetes fríos.
ResponderEliminarMe quedo con esto xDD, que bueno xDD